La Fraternidad Misionera
de María
Vive la espiritualidad del Éxodo, ante todo, como una actitud interior personal. Sus miembros aspiran constantemente a despojarse de sí mismos, de sus logros y comodidades, de sus seguridades y conquistas, para aprestarse a escuchar mejor la voz del Señor y ponerla en práctica en cada momento concreto de la vida
Constituciones de la FMM 18